miércoles, 17 de noviembre de 2010

Un día de escuela en 2018.

Son las 9:00 y entramos en clase. Ya he conectado la pizarra digital y he preparado los materiales multimedia para la clase de Lengua: hoy nos toca explicar los numerales e indefinidos y repasar la acentuación de los hiatos. Tengo una presentación, una cuantas actividades para la PDI y otras que luego pasaré a los niños a través de la intranet del aula vía wifi, luego tendrán que hacer 5 ejercicios en sus i-Pads antes de pasar a la clase de Mate.

Hoy en la clase de Mate: Marta, Rubén y Marcelo han preparado una explicación de los Criterios de Divisibilidad. Con mi ayuda vía videoconferencia, ayer por la tarde preparamos una presentación con Prezi y un listado de webs con actividades para repasar luego en casa.

Después de la exitosa clase de Marta, Rubén y Marcelo, tenemos preparadas las escenas de teatro en Inglés que llevamos ensayando dos semanas, por supuesto las grabaremos en vídeo sobre la pantalla greenscreen para luego insertar los decorados que hemos estado “pintando” con el programa de diseño y retoque fotográfico del i-Pad después de haber hecho los diseños a mano y en papel en las clases de Plástica.

Posiblemente tengamos que terminar las representaciones después del recreo antes de acabar la jornada a las 14:00h.

La verdad es que da gusto trabajar con estos chicos, se portan tan bien... desde el primer día que nos conocimos y después de establecer unas normas sencillas de convivencia, no hemos tenido ni un solo problema, además, como es habitual, el primer día conocí también a sus padres ya que, entre todos, establecimos las normas y pasos a seguir en nuestro curso escolar, y la colaboración es vital.

Después de las 14:00 h y antes de irme a comer tengo que reunirme con las compañeras de ciclo para contarles las ideas que tenemos para el festival de invierno, que este año trata sobre la antigua Grecia y también tenemos que hablar de las fechas para las juntas de evaluación ya que tenemos que preparar las notas y luego pasarlas al registro del centro con nuestra contraseña personal de tal manera que los padres y los alumnos reciban sus notas el último día antes de las vacaciones de Navidad en sus computadoras.

En fin, un día bastante liado, como todos, pero la verdad es que no tiene precio este trabajo, hacer lo que realmente te gusta hacer, con alumnos educados que responden y aportan tantas cosas y en un centro en el cual puedo disponer del tiempo y los recursos necesarios, ¡Qué afortunado soy!.

Entrada del diario de

Carlos Matellano Cancela, maestro de primaria en Madrid, especialista en Inglés.

17 de Noviembre de 2018